Viernes Santo

Cristo abraza el dolor de la cruz para salvarnos a todos.

En el Viernes Santo celebramos la Pasión y Muerte de Jesucristo. Celebramos la muerte de Jesús, quien ha muerto por cada uno de nosotros y por toda la humanidad para reconciliarnos con el padre. En este día se conmemora el amor extremo de Cristo para rescatarnos.

Hoy no se celebra la Eucaristía. El altar luce sin mantel, sin cruz, sin velas ni adornos. Recordamos la muerte de Jesús. Los ministros se postran en el suelo ante el altar al comienzo de la ceremonia. Son la imagen de la humanidad hundida y oprimida, y al tiempo penitente que implora perdón por sus pecados.

En la vida de un cristiano, la luz tiene que estar presente y tiene que doblegarnos bajo su peso. No pensemos nunca en una vida fácil, lejos del sufrimiento y del sacrificio. La vida terrena es para luchar, para caer en el polvo mil veces y levantarse otras mil veces, es una vida para ser humillados por amor a Cristo.

No soñéis con vidas sin cruces. Porque la cruz es un instrumento connatural a la vida del hombre y en especial para aquellos que, por vocación hemos aceptado seguir a Cristo por los caminos del Calvario.

Continuar leyendo

Un emocionante encuentro de amor y lágrimas

128La cofradía de Cristo Resucitado sale de San Gil acompañando a la imagen de Nuestra Señora de los Dolores.

El hermoso encuentro entre las imágenes de Jesús con la Cruz a Cuestas y Nuestra Señora de los Dolores fue acogido multitudinariamente con más expectación que nunca.

Sonó la carraca y tras ella las primeras melodías de las cornetas que daban comienzo a una sentida procesión del encuentro de Jesús con la Cruz a Cuestas que salía de la iglesia de San Cosme y Nuestra Señora de los Dolores que partía de la iglesia de San Gil pasadas las 19:45 horas.

La cofradía de Cristo Resucitado de nuestra parroquia, junto a otras cofradías, también quiso acompañar a la cofradía Nuestra Señora de los Dolores que portaba la imagen de la Dolorosa acompañada por fieles devotos.

Una hora y media más tarde las tallas llegaban a la plaza y las agrupaciones musicales comenzaron a entonar la melodía del acercamiento. Un momento emotivo de intercambio de flores blancas y rojas que simbolizan la pureza de María y la sangre de Jesucristo.

Jueves Santo

Hoy celebramos la alegría de saber que esa muerte del Señor, que no terminó en el fracaso sino en el éxito, tuvo un por qué y para qué: fue una "entrega", un "darse", fue "por algo" o, mejor dicho, "por alguien" y nada menos que por "nosotros y por nuestra salvación" (Credo).

"Nadie me quita la vida, había dicho Jesús, sino que Yo la entrego libremente. Yo tengo poder para entregarla." (Jn 10,16), y hoy nos dice que fue para "remisión de los pecados" (Mt 26,28).

El mundo vive sumido en las tinieblas del egoísmo de una cultura de la muerte. El Jueves Santo es un día en el que Dios nos invita por medio del servicio a ser esas lámparas que lleven la luz de Cristo al mundo. También este día debemos reconocer el amor de todos esos hombres que deciden dejarlo todo por seguir a Cristo en la entrega total al servicio de los demás: religiosas, religiosos, misioneros, hombres y mujeres consagrados a Dios.

“El cristiano, es pecador –todos lo somos, yo lo soy– pero tenemos la seguridad de que cuando pedimos perdón el Señor nos perdona”.
Papa Francisco

Continuar leyendo

La Borriquilla procesiona ante miles de burgaleses

Pasadas las 11:45 de un domingo lluvioso, daba comienzo en la Plaza Mayor la bendición de las Palmas y Ramos por el arzobispo de Burgos, Fidel Herráez. Seguidamente, dio comienzo la procesión por algunas calles del centro histórico hasta culminar mas allá de las 13:15 en La Catedral para dar comienzo a la eucaristía presidida por el Arzobispo.

A pesar de la intermitente lluvia, miles de burgaleses no quisieron perderse este tradicional acto, que portando sus Palmas y Ramos arroparon a La Borriquilla al ritmo de las bandas de música 'Círculo Musical Burgos' y 'Ciudad de Burgos'. El paso fue acompañado por todas las cofradías y hermandades penitenciales de la ciudad, entre las que se encontraba la cofradía del Cristo Resucitado, perteneciente a nuestra parroquia de la Sagrada Familia.

‟¡Qué difícil es poder compartir esta alegría para quienes solo confían en sus propias fuerzas y se sienten superiores a otros!”

Papa Francisco

El Papa Francisco celebró el Domingo de Ramos en la Plaza de San Pedro ante miles de personas y recordó que ante las calumnias siempre hay que mirar a la Cruz.

“La liturgia nos invitó a hacernos partícipes y tomar parte de la alegría y fiesta del pueblo que es capaz de gritar y alabar a su Señor; alegría que se empaña y deja un sabor amargo y doloroso al terminar de escuchar el relato de la Pasión”, explicó el Santo Padre.

126b  126c

Semana Santa: Celebrar el paso de la muerte a la vida

Fidel Herráez Vegas (Arzobispo de Burgos)

gil hellin

Al finalizar el camino cuaresmal, la celebración del domingo de Ramos nos introduce en la Semana Santa, la semana grande de los cristianos. La liturgia de la Iglesia, a través de las celebraciones que se suceden estos días, pone ante nosotros los misterios centrales de nuestra fe: la Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. Él, que «muriendo destruyó nuestra muerte y resucitando restauró nuestra vida», como cantaremos en el Prefacio de Pascua. La Semana Santa sigue ofreciéndonos la oportunidad de descubrir más profundamente lo que significa el amor de Dios por nosotros y la fuerza con que se derrama sobre toda la humanidad.

Un año más somos invitados a acompañar a Cristo en su paso de la muerte a la Vida. No se trata de hacerlo como un simple recuerdo del pasado, o como una manifestación religiosa meramente festiva o cultural, sino de vivir con fe lo que en la liturgia de estos días santos se nos relata y actualiza. En verdad: actualizaremos los misterios centrales de la vida de Cristo en orden a nuestra salvación y, por el Espíritu, seremos introducidos en la nueva Vida que Él nos regaló y sigue ofreciéndonos. Ello ya aconteció en nuestro bautismo; pero la consideración de estos días ha de ayudarnos a agradecer y a renovar el don de la fe y de la vida cristiana que recibimos, pues «el paso de esta vida mortal a la otra inmortal, es decir, de la muerte a la vida, se ha obrado en la pasión y resurrección del Señor» (S. Agustín. Enarrat., 120,6).

Continuar leyendo

Parroquia Sagrada Familia